Nico Piccardo, actor argentino del off-Broadway, nos habla de su carrera internacional

Enfoque de oficio: Actor de  teatro, cine y TV.

En esta entrevista con Becasting.com.ar, Nico Piccardo nos cuenta cómo fue el recorrido que lo llevó desde su Buenos Aires natal hasta algunos de los escenarios más importantes de la Gran Manzana. 

-Hola Nico, ¿cómo fueron tus inicios en el mundo de la actuación?   

Nico Piccardo: Empecé a hacer teatro cuando ya estaba bastante avanzado en mis estudios de abogacía y la actuación fue un camino de ida. Una vez que la probé, me enamoré. Y un día lo que era un hobby pasó a ser un sueño al que nunca más le pude dar la espalda. Cuando me di cuenta de eso renuncié al estudio jurídico en el que trabajaba y empecé este hermoso recorrido. 

-¿Qué formación actoral realizaste?

NP: En Buenos Aires me formé en la escuela de Julio Chávez (un actor y maestro de actores al que respeto y admiro muchísimo) y en New York en el conservatorio de la American Academy of Dramatic Arts. Después, intento seguir formándome. Por ejemplo, antes de que comience la pandemia estuve tomando clases de actuación frente a cámara y ahora estoy por empezar una de self-tape auditions y castings por zoom.  

-Desde 2015 estás radicado en los Estados Unidos, ¿cómo es la experiencia de trabajar en el extranjero?  

NP: Cualquiera sabe que una carrera en la actuación es de por sí difícil por la incertidumbre laboral, por la cantidad de veces que uno tiene que lidiar con el rechazo o por las frustraciones que no son pocas. Hay que tener mucha resiliencia. Dicho eso, creo que también tuve mucha suerte. Apenas me gradué del conservatorio una agencia de managers quiso firmar conmigo. En un principio, la barrera idiomática y el hecho de no poder hacer un acento americano, sí me representaba una desventaja ya que el espectro de roles en los que podía trabajar era menor. Pero después, gracias al trabajo que hicimos con mi coach, pude mejorar mi dicción en inglés y expandir mis posibilidades.

 -En teatro te dirigieron dramaturgos de la talla de Douglas Carter Beane, ¿qué es lo que más te fascina del oficio de actor de teatro?

 NP: Trabajar con Doug y todo su equipo fue una experiencia hermosa. Lo mismo a principio de este año cuando tuve la suerte de poder trabajar en Hamlet protagonizada por la increíble Ruth Negga (nominada al Oscar) que, en mi opinión, es una actriz inmensa. A mí lo que más me gusta de hacer teatro es ensayar. Si bien uno ensaya con el objetivo de estrenar, el hecho de tener 3 ó 4 semanas para “jugar” con el material es  muy gratificante artísticamente. Puedo probar diferentes maneras de hacerlo, abordar el texto desde distintos ángulos, hacerlo mal, frenar, volver a empezar. Es un proceso que disfruto mucho. Y obviamente también es hermoso cuando uno presenta el trabajo ante un público. Esa adrenalina de hacerlo en vivo es de lo más lindo del teatro.

*Crédito fotográfico:  Mark Wyville

 -Actualmente formás parte de la obra online “Nueva York-Buenos Aires”, ¿cómo es ser parte de este proyecto nacido en cuarentena? 

NP: El proyecto nació por una necesidad de no quedarnos quietos durante la cuarentena. Y justamente esta nueva modalidad online me dio la oportunidad de actuar en un proyecto argentino y en español, algo que me da gusto volver a hacer después de tanto tiempo. Lo más desafiante fue adaptarnos a esta nueva modalidad que es una mezcla de teatro y cine. Porque actuamos en vivo pero a la vez la técnica actoral (el uso de la voz y el cuerpo) es más parecida a la que usamos en tele o cine.  

-¿Qué consejo le darías a los artistas están dando sus primeros pasos en el mundo de la actuación? 

 NP: Audiciones y actuar son dos deportes totalmente distintos. A actuar se aprende, a audicionar también. Las audiciones no son nada fáciles para el actor, pero son necesarias. Por eso les recomiendo que tomen clases y que practiquen yendo a muchos castings. Y mi mayor consejo es: “sean ustedes mismos”. No traten de ser algo que creen que el director quieren ver. 

Primero, porque no saben qué es lo que quieren ver. Segundo, porque van a ser más auténticos y, por ende, van a tener más oportunidades de que les vaya mejor si son ustedes mismos. Y finalmente, porque lo realmente importante es mostrar el trabajo que uno puede hacer. El trabajo de los directores de casting es tener memoria. Si ustedes hacen un buen trabajo y se muestran como son ,ellos se van a acordar de ustedes cuando el rol indicado llegue.

*Crédito fotográfico retrato: David Noles